Un Erasmus o cualquier intercambio académico sea internacional o no, va más allá de lo que cualquier persona que no lo haya vivido o experimentado en sus carnes pueda imaginar. No se trata solo fiesta y descontrol como muchas personas se piensan, además de ello es un periodo de crear nuevas relaciones, permite conocerse a uno mismo. Hay innumerables factores que hacen que tus hábitos y forma de pensar evolucionen, y no solo en el periodo de tiempo que dura, sino que hace de transición para convertirte en una persona totalmente diferente y más completa en todos los aspectos de la vida.

Nueva nacionalidad
Sin duda, la elección de un determinado país será uno de los factores que influirá de una manera determinante a lo largo de tu vida.
Todo será nuevo para ti, el idioma, las costumbres, la gastronomía, los ideales de una población totalmente diferente a la de tu país natal. La constante curiosidad que despertarán en ti estas nuevas sensaciones, así como tu afán por aprender y habituarte a ellas, serán de vital importancia a lo largo de tu vida, ya que cambiará en cierta medida tu manera de pensar. Te convertirás en una persona mucho más predispuesta al cambio.
Una vez tu intercambio haya terminado sentirás que perteneces a ese lugar, ya que aunque el tiempo transcurrido haya sido insignificante comparado con toda tu vida, esa experiencia única hará que te sientas un ciudadano más.

Aprenderás idiomas
Adquirirás un nivel básico del idioma de tu nuevo país, aunque no vuelvas siendo bilingüe, al menos sabrás pedir el pan en un supermercado o preguntar cuanto cuesta algo. También aprenderás muchas palabras y expresiones de las distintas nacionalidades con las que acabarás compartiendo tiempo en tu Erasmus. Desde el “obrigada” Portugués al “dziękuję” Polaco ( ambas palabras significan gracias).
El inglés, probablemente, será el idioma con el que te comuniques con el resto de estudiantes y de la población por lo que adquirirás una soltura y un desparpajo con el que antes no contabas.

Nueva familia
Las personas que conocerás en tu nueva vida se convertirán en tu familia, serán tu apoyo, aquellos con los que compartirás uno de los momentos más magníficos de tu vida y vivencias en las que todo el mundo va con el mismo objetivo, formarse y disfrutar. Por ello, los vínculos creados, durarán toda la vida. Además, te llevarás amistades de otras nacionalidades, que te aportarán cosas distintas a lo que estás acostumbrado, y eso lo hace muy especial y enriquecedor.
Otra de las ventajas, es que tendrás un hogar en distintos puntos del planeta y de tu propio país. El período tras esta experiencia es difícil, pero algo bueno que tiene es que intentarás ver a tu nueva “familia” lo más frecuentemente posible. Sus casas se convertirán en pequeños hoteles improvisados para acogerte.
Viajarás como nunca antes lo has hecho
Si algo caracteriza a esta experiencia, es la facilidad para realizar viajes. El tiempo del que dispondrás para realizarlos, así como las distintas rutas e itinerarios baratos que no están disponibles en tu país de nacimiento, hacen que viajar durante este periodo sea una constante y una motivación. Además, la gente que conocerás estará igual de predispuesta que tu para realizar estas aventuras.
Viajar, viajar y viajar. A pesar de estar días completos viajando, lo que te va a llegar a aportar todos los destinos visitados junto a tu nueva familia, hará que esas largas noches de tren, autobús o coche se queden en una experiencia más de esta inolvidable aventura.
No olvides que para viajar de una manera segura y sentirte protegido puedes consultar nuestros seguros para todo tipo de intercambio aquí.

Valorarás más lo que dejaste en tu país
Aunque tendréis la mente ocupada con tantas sensaciones encontradas, aprenderéis a echar de menos vuestra antigua vida y a valorar desde otra perspectiva lo que “dejastéis atrás”.
Esto os pasará con vuestra familia y amigos, con los que hablaréis menos de lo que deberíais, pero con los que cada conversación provocará en vuestro interior un sentimiento agridulce. Pensaréis: “los tengo ahí, pero están tan lejos”. De vez en cuando echareís de menos un abrazo de uno de vuestros seres queridos, y aunque pueda parecer una sensación negativa, es todo lo contrario, valorareis lo que tenéis aún más.
Uno de los puntos en común en los que todos los estudiantes que salen al extranjero coinciden a la hora de echar de menos, es la gastronomía, esto no significa que la gastronomía de la nueva ciudad sea mala, pero al estar acostumbrado a vuestra comida de toda la vida los platos que antes considerabais repetitivos o cansinos, los veréis como un manjar. Algo similar pasa con el clima.


Mayor independencia
Para muchos, esta época es el primer contacto con la vida independiente. En ella aprenderás a valerte por ti mismo sin depender de nadie absolutamente, a llevar un presupuesto mensual o semanal que te permita sacar adelante todo lo que necesites, a estar alejado de aquellas personas que suelen proporcionarte ayuda, a hacer la compra sin tirar la casa por la ventana, a cocinar diariamente, a llevar el peso completo de las labores domésticas, todo ello en un nuevo país, ¿todo un reto no?
En definitiva, madurarás bastante en esta experiencia, ya que no es solo irte a vivir de manera independiente, si no que, además, lo haces en un sitio totalmente nuevo.
Mayor empleabilidad
Muchos estudios defienden desde bastantes años atrás, que toda persona que haya participado en algún programa de intercambio a nivel internacional tendrá muchas más oportunidades de encontrar trabajo en comparación a una persona que no.
Además de aportarte esta mejora con respecto a tu competencia personal te aportará muchos conocimientos a nivel general de distintos países y aspectos a nivel social y burocrático, que podrán servirte para un futuro a la hora de entrar en el mercado laboral.

Aumentará tu confianza
Cuando se dice que esta experiencia cambia a una persona es por algo. Todo lo vivido en tu experiencia será muy beneficioso para tu confianza en ti mismo.
- Darte cuenta de tu capacidad para enfrentarte a nuevas situaciones y adversidades.
- Aprender nuevos idiomas.
- Integrarte en una nueva sociedad que conocías poco o nada.
- Valerte por ti mismo.
- Verte lejos de tu gente.
Con lo anterior aumentará tu confianza, autoestima y te tendrás valor para tomar decisiones arriesgadas en un futuro.


Idioma
La existencia de un idioma propio en tu país de destino es otro de los factores a estudiar. Según tus expectativas, deberás elegir según la utilidad que puedas sacarle. Hay diferencias significativas entre aprender Polaco (que solo se habla en Polonia) y aprender inglés que es una de las lenguas más hablada en todo el mundo. Insistimos, según tus necesidades y expectativas deberás elegir el país que más se adapte a ti.
Precios
Según tu poder adquisitivo, deberás mirar más o menos por tu bolsillo a la hora de elegir un destino u otro. Hay muchos factores que influyen en el coste mensual o anual de tu estancia, por lo que te vamos a mostrar cuales son algunos de los más relevantes:
Alojamiento
Te avisamos, los precios de alojamiento para los Erasmus tratándose de un piso compartido, suelen dispararse. Hay ciudades y países más asequibles que otros, pero por lo general los precios de alquileres suelen ser elevados, ya que los caseros al no tratarse de estudiantes procedentes de su mismo país se aprovechan de la situación. Te aconsejamos analizar previamente las distintas posibilidades disponibles para haceros una idea de los precios.
Te aconsejamos que no contrates nada por internet, a no ser que sea una institución oficial, como puede ser la propia universidad, y espera a estar en vuestro destino para tomar una decisión u otra.
Por regla general las universidades disponen de acuerdos con residencias para ofrecer precios más económicos a estudiantes, por lo que échales un ojo y abre esa posibilidad, ya que también conocerás a mucha más gente.

Cesta de la compra
La media de gasto de la cesta de la compra es un dato bastante significativo que te servirá para hacerte una idea de cuánto necesitarás según el destino al que finalmente te decidas residir. Según el destino, habrá productos que difieran de un precio a otro de manera notoria, como es el caso del pescado en centro Europa donde la importación de este es bastante costosa, y que por lo tanto, es mucho más caro que en países cercanos con costa. Caso contrario el del alcohol, donde su precio va a resultar bastante bajo en comparación con vuestro país de origen (si se trata de un país centro-europeo).
Coste de la cesta de la compra en los principales países europeaos
Ocio y viajes
El ocio ocupará gran parte del tiempo en vuestro intercambio, por lo que tendrás que organizarte para poder llegar a fin de mes. Depende de las ciudades en las que realices tus estudios, el ocio será más o menos caro. Habrá ciudades donde comer en un restaurante o salir de fiesta mas de una vez a la semana será impensable, en otras podrás comer menús por unos 3 o 4 euros.

Precio del transporte
Al ser estudiante extranjero, como es lógico, tu única manera de moverte tanto dentro de la ciudad como a la hora de viajar, será a través del transporte público. El presupuesto mensual en transporte será un importante factor a tener en cuenta, ya que sin darte cuenta irás haciendo uso de este con un bajo coste en comparación al resto de gastos de manera individual, pero notorio al final del intercambio.
No queremos decir que tu decisión dependa exclusivamente de esto, pero si que prestes especial atención a ello porque tu presupuesto mensual/anual puede variar bastante por ello.
Precios del transporte público de las principales ciudades europeas.


Localización
La localización de un país influirá bastante en tu experiencia, por lo tanto, deberá ser importante para elegir tu destino, según:
La distancia a tu país de origen te condicionará más o menos según las veces que tengas planeadas volver al hogar.
El clima será relevante en función de tu tolerancia a determinados climas, deberás tener más o menos en cuenta este factor. Ya prefieras los climas cálidos o más fríos.
Proximidad a otros países es importante ya que un país sea próximo a otros países hace que las posibilidades de realizar viajes a buenos precios aumenten considerablemente.
Te recomendamos que elijas un país del centro de Europa si buscas una buena localización para viajar lo máximo posible.

Convalidaciones de asignaturas
Hay destinos en los que no podrás convalidar todas las asignaturas que te gustarían. Para ello lo ideal sería planificarlo con antelación y estudiar a fondo cada uno de los destinos. Puedes solicitar a tu universidad que incluya en el plan de convalidaciones alguna asignatura que en el plan de estudios de la universidad de destino sea parecida. Que la acepten o no es otra historia, pero hay que intentarlo.
Es importante pensar que la vuelta a la realidad te esperará la universidad de nuevo. La elección de un destino en el que las convalidaciones de asignaturas sean numerosas es esencial, pero que la elección sea lógica y no te sobrecargue de trabajo.
Prestigio de la universidad
El simple hecho de irte a estudiar al extranjero dice mucho de ti, pero si además lo haces en una universidad con un determinado prestigio, tu experiencia será totalmente enriquecedora para tu futuro. Tienes que tener en cuenta que en estas universidades de prestigio se os exigirá más académicamente hablando, pero cuenta con numerosas ventajas que te diferenciarán del resto de estudiantes a la vuelta.
Hay muchas universidades privadas que entran dentro del programa Erasmus + y en el que los tramites a realizar son exactamente iguales que en universidades públicas o de “menos prestigio”.

Cultura del país
¿Qué tipo de país buscas? Esta pregunta deberías contestártela con sinceridad. La cantidad de ofertas de países que ofrecen los distintos programas de movilidad, hace que elegir destino no sea tan fácil como parece. La variedad y riqueza cultural de la que disponemos en todo el mundo es enorme. Tienes que tener en cuenta como funcionan los países a la hora de elegirlos. Cada país es un mundo, y funciona de manera muy distinta a otro. La elección de uno u otro dependerá de tu manera de pensar, vivir y de tus ideales sociales.
Hay innumerables factores que influirán en la decisión: gastronomía, costumbres, funcionamiento de organizaciones públicas, sanidad… Estudia bien este apartado y elige de una manera acorde a tu manera de pensar y vivir.

Como es lógico, resulta esencial incluir en tu currículum vitae esta experiencia en el extranjero, dado que lo que te aporta tanto a nivel personal como profesional resulta de gran relevancia a la hora de competir para un puesto de trabajo en cualquier empresa.
Dicho esto, seguro que no es la primera vez que te planteas cual es la mejor manera de incluir en tu currículum esta experiencia y lo que te ha aportado. Como ya te contamos en el artículo “¿cómo afecta un Erasmus a tu futuro laboral?”. Las ventajas de cara a tu futuro de una experiencia Erasmus, son innumerables. Cabe destacar que el paro entre aquellas personas que se han atrevido a realizar esta experiencia es un 23% inferior.
Los responsables de Recursos Humanos cada vez dedican menos tiempo a los currículums que pasan por sus manos durante un reclutamiento. Por lo que hay que destacar de una manera significativa con respecto a lo demás, una de las opciones para hacerlo es la de incluir una de las grandes aventuras de tu vida para que no pases desapercibido.

Cómo incluir tu experiencia en el extranjero en el currículum
El extracto es una parte bastante importante a la hora de sorprender a un experto de Recursos Humanos. En él, resumes tu experiencia profesional, tus intereses y tu motivación por el puesto de trabajo ofertado.
Para incluir tu experiencia internacional en el extracto, lo esencial es explicar tanto los motivos que te llevaron a dar este gigantesco paso cómo aquello que aprendiste y te ayudo a desarrollar nuevas competencias profesionales. Así, a modo introductorio darás a entender que eres una persona con decisión y valentía para irte a vivir a otros países con nuevas ambiciones y ello mantendrá la atención del reclutador.
Idiomas
Si en tu Erasmus aprendiste idiomas de manera significativa, no dudes en destacarlo. Tanto el inglés, que lo aprenderás seguramente sea cual sea tu destino, como la propia lengua del país en el que estuviste. Los idiomas como ya sabrás son pieza clave en el proceso de selección de muchísimas empresas.

Incluye la universidad donde realizaste tus estudios Erasmus
A la hora de indicar tus estudios, no olvides dejar un apartado para el año o periodo en el que realizaste el intercambio. Indica el nombre de la universidad y lo que estudiaste. De esta manera destacas que no solo has realizado tus estudios en la universidad del país en el que vives, también recuerda que has realizado estudios en una universidad internacional en la que habrás convivido con estudiantes de ese país y habrás adquirido unos conocimientos que de otra manera quizás no habrías adquirido.
Una vez en la entrevista
En caso de que tu curriculum llame la atención, una vez en la entrevista no olvides que al haber destacado tanto tu experiencia Erasmus, te preguntarán sobre ello. Mantén la calma y explica de una manera coherente todo lo que aprendiste y como te ayudo a evolucionar de manera profesional.
Volvemos a repetírtelo, recuerda que si los Erasmus tienen una tasa de desempleo un 23% menor es por algo. Por lo que a priori tendrás una ventaja sobre otros que no lo hayan realizado. Juega bien tus cartas.
El Erasmus, como cualquier intercambio suele generar tal impacto en la vida de las personas que se benefician de él, que el choque con la realidad al volver suele derivar en el llamado “síndrome o depresión post Erasmus”. Esto suele afectar en mayor o menor medida a todos los estudiantes que están de vuelta en sus respectivos países. No te preocupes, no es nada grave, solo se trata de un “síndrome de repatriación” según los expertos.
Este artículo, más que adentrarse en temas de psicología, te será de utilidad para llevar mejor este proceso. Por lo tanto, aquí van algunos consejos que te ayudarán a enfrentarte a la vuelta a casa y aprovechar las oportunidades que este maravilloso programa os brinda:
Pasea tus primeras semanas por tu ciudad de origen
Echar de menos tu ciudad de intercambio es uno de los síntomas del síndrome post erasmus. Volver a tu antigua ciudad será una nueva aventura. Lo verás todo con un nuevo encanto que antes por costumbre no apreciabas. Verás la ciudad desde un prisma totalmente distinto. Te sentirás como un turista ya que querrás ir a todos los sitios a los que antes no habías ido y que ahora, tras casi un año fuera, has echado en falta.
Todo esto ayudará a no idealizar tanto tu ciudad Erasmus y a darte cuenta de la suerte que tienes de vivir donde vives.

Aprovecha para ver al mayor número de personas posible
A tu llegada, serás el “protagonista”. Todo el mundo querrá verte después de tanta ausencia y tu agenda se llenarán de planes ese verano que vivirás con añoranza pensando en tu curso pasado fuera de casa. Estos planes los harás incluso con gente con la que no tenías demasiado contacto antes de marcharte, querrán verte para saber sobre tu experiencia. Saca partido de esta situación y no dejes de hacer cosas y mantener la mente ocupada. Así evitarás acordarte de tu vida Erasmus en la que vivías en un auténtico “Non Stop”.
Obviamente no estamos diciendo que debas olvidar todos tus recuerdos, solo que para no tener ese sentimiento de añoranza constante debes mantenerte ocupado, ya que a pesar de intentarlo no van a parar de preguntarte por esta etapa. Al fin al cabo será inevitable no acordarse de tu maravillosa experiencia pase el tiempo que pase.

No dejes de viajar
Una de las aspectos que más extrañarás sin duda de tu intercambio será la facilidad para organizar viajes y poder disfrutarlos semana tras semana. La cuestión es y era clara, no perderse ni una era el principal objetivo. Ahora que tus vivencias te han proporcionado un espíritu aventurero y una proactividad abrumadora, viaja. Hazlo a todos los sitios a los que puedas. Organiza pequeñas escapadas, desplazamientos a otros países o incluso a otras zonas de tu provincia. Así lograrás llenar el vacío que los viajes Erasmus han causado en ti.

No pierdas el contacto con tu “familia Erasmus”
¡Como echarás de menos a tus compañeros! El síndrome post erasmus hará que recuerdes a las amistades creadas con excesiva nostalgia.
Superar la perdida de contacto diaria con tus compañeros de Erasmus, aquellos que consideraste tu segunda familia durante casi un año y ya para el resto de tu vida, no será tarea fácil en absoluto. Por lo tanto intenta tenerlos presente constantemente. Afortunadamente hoy en día los medios digitales facilitan el contacto frecuente, pero no te contentes con ello. Organiza quedadas, intenta verlos lo máximo posible. Aunque los compromisos profesionales o académicos dificulten que os veáis todo lo que deseáis, cada quedada será un soplo de aire fresco para crear nuevos momentos y recordar viejos.

Aplica y usa los conocimientos adquiridos
Saca todo el provecho a tu experiencia adquirida en el Erasmus para mejorar de cara al futuro. Por ejemplo, si has utilizado y hablado muchísimo el inglés, aprovecha e intenta sacarte el nivel más alto que puedas en tu año de llegada. Con el paso del tiempo se te hará más difícil porque no tendrás el idioma tan “fresco” al no trabajarlo todos los días como hacías en el extranjero.
Busca empleo a tu llegada. Aquí te dejamos un post con los beneficios que te aporta esta experiencia a tu vida laboral. Las empresas están mucho más predispuestas a contratar alumnos que hayan estado de Erasmus por delante de aquellos que no. En definitiva, el Erasmus te habrá dotado de unas condiciones de las que podrás beneficiarte a tu llegada. Algo esencial para superar el síndrome post erasmus es no parar de hacer planes y mantener la mente ocupada, por lo tanto, trabajar en el período de vuelta a casa, sería una gran opción a la hora de mantenerse ocupado.
Intenta aprovecharte de otra beca
Si aún sigues sin poder llenar el vacío de lo vivido en el Erasmus ábrete a otras opciones. Posibilidades hay muchas: voluntariados, becas de intercambio a otros países, irte de Au pair o incluso a través de una empresa con trabajo o prácticas en el extranjero. Cualquiera de estos programas serán experiencias totalmente nuevas en tu vida y servirán para continuar tu periplo.

ESN (Erasmus Student Network)
Si lo que quieres es continuar viviendo muchos de los beneficios que un programa de intercambio te ofrece (multiculturalidad, aprendizaje de idiomas, fiestas, viajes..) pero no quieres y/o no puedes salir de tu ciudad, quizás debas plantearte el ingresar en ESN.
Definida por si misma como: “Organización internacional de estudiantes sin ánimo de lucro. Nuestra misión es representar a estudiantes internacionales, por lo tanto, brindamos oportunidades para el entendimiento cultural y el autodesarrollo bajo el principio de Stutents Helping Students”.
Se trata de una organización muy interesante con la que podrás seguir desarrollando tus habilidades que desarrollaste en tu Erasmus, comunicativas, expresivas, proactividad… Visita su página web para más información.

Para empezar nos gustaría comentar que es casi imposible empezar con mal pie un Erasmus. Será algo mágico y a la vez una época de adaptación, de encontrar vuestro lugar en vuestra nueva ciudad. La finalidad de este post es daros algunos consejos sobre el comienzo de la experiencia y facilitaros información que os ayude, basada en nuestra experiencia como estudiantes internacionales.
Analiza bien el lugar en el que vais a residir
Una de vuestras prioridades debería ser dejar el tema del piso o residencia zanjado cuanto antes. Eso si, no os precipitéis, estudiad cada propuesta a fondo, nuestra recomendación es que os centréis en buscar residencias ofrecidas por la propia universidad de destino. Además centra tu atención ya no solo en el propio lugar de residencia en sí, si no, en las proximidades, buena conexión para el transporte, supermercado, distancia al centro, etc.
Evitad el exceso de trámites
Todos sabemos que en el Erasmus hay mucho papeleo, tanto antes de iros como a vuestra llegada. Esto se puede convertir en una tarea tediosa si no os ponéis cuanto antes a terminarla, por lo tanto, os recomendamos que nada más llegar os paséis por vuestra universidad y dejéis todo listo lo antes posible y podáis poneros al día con la ciudad y vuestra nueva familia.
Estudiad bien el transporte de la ciudad
Investigad acerca del transporte de vuestra ciudad, cuales son los horarios que más utilizaréis, que líneas, a que hora empieza y acaba las líneas de buses o tranvía. Los lugares a los que llega, tanto universidad, centro urbano o el centro comercial más cercano. Es conveniente sacarse un bono mensual o trimestral en caso de que exista.


Asistir a las actividades de integración de alumnos internacionales
En el comienzo del Erasmus, notaréis como se anunciarán decenas de eventos para integrar a los alumnos internacionales. Asistid a todos, ya que la cantidad de gente de distintas nacionalidades que conoceréis en estas reuniones marcarán vuestra experiencia. Hay actividades de todo tipo: excursiones, deportes, cenas internacionales, intercambio de idiomas o juegos alrededor de la ciudad.
Probablemente vuestra universidad también organizará eventos de bienvenida. No os los perdáis, ya que aparte de conocer a vuestros compañeros, os entregarán algún regalo de bienvenida, además de que os explicarán los distintos departamentos y lugares de interés de la facultad.
Explorad vuestra ciudad
Aunque ya tendréis tiempo de hacer esto, siempre conviene explorar un poco la ciudad y saber, al menos, donde se encuentran situados los principales lugares de interés (monumentos, hospitales, comisarías, consulados, grandes superficies y supermercados más baratos, así como sitios baratos donde comer los primeros días donde no tendréis tiempo ni lugar donde cocinar). Nunca está de más aceros un freetour para ir conociendo estos lugares de interés.


Ahora que vuestro Erasmus ha empezado, los viajes están a la vuelta de la esquina. Los intercambios van acompañados de viajes de todo tipo, y por regla general, viajaréis pensando en gastar lo menos posible. Por ello, queremos hablaros sobre las oportunidades de alojamiento. Últimamente las posibilidades están creciendo a un ritmo vertiginoso y hay para todos los gustos. Aquí os dejamos las formas de hospedaros que más os pueden interesar.
Hostales
Sin duda alguna, son el método de alojamiento preferido por los estudiantes Erasmus. Los bajos precios, la presencia de otros estudiantes internacionales y el buen ambiente reinante en ellos, favorecen su utilización.
Normalmente, las habitaciones son compartidas con otros estudiantes o clientes del hostal. Es difícil encontrar un habitación completa solo para vuestro grupo, pero hay excepciones y podéis tener suerte.
Os recomendamos que cuando queráis hospedaros en un hostal, utilicéis la aplicación web Hostelworld. A través de esta aplicación podréis encontrar una amplia variedad de Hostels existentes dependiendo de la ciudad en la que os queráis alojar. El funcionamiento es simple: poned en el buscador la ciudad, y enseguida os ofrecerán una cantidad enorme de posibilidades con sus precios, nota media de valoración y otros factores importantes.
Couchsurfig
Creemos que es casi imposible que no hayáis escuchado hablar sobre este método de alojamiento. Su funcionamiento es muy simple, el dueño de una casa, os cede un lugar donde dormir totalmente gratis. Cuenta con muchas ventajas:
-os permite involucraros en el día a día de un lugareño de la ciudad a la que hayáis elegido viajar.
-Si vuestro presupuesto es ajustado es idóneo, porque repetimos, es totalmente gratis.
-Podréis practicar idiomas y vivir las costumbres de un ciudadano de la ciudad en la que os alojéis.
-Si el dueño es buen anfitrión, puede que os haga de guía turístico y recomendaros los mejores sitios de la ciudad. La experiencia suele ser muy enriquecedora.
-Podréis conocer a gente fantástica a través de esta experiencia.
Está pensado para viajes individuales o de grupos reducidos. Si queréis hospedaros con un grupo de amigos lo mejor es que utilices un AirBnb o un hostal.
Visitad couchsurfin.com para informaros de una manera más detallada ¡seguro que os entusiasma la idea!
Airbnb
Conocida ya prácticamente por todos, Airbnb es genial si viajáis en grupo y buscáis la tranquilidad y comodidad que ofrece una ‘casa propia’. Existen en casi todas las ciudades de Europa, y suelen tener precios bastante económicos. El precio del alojamiento suele depender del barrio, la zona, el tipo de casa y los lujos de los que disponga. Si lo que queréis es disfrutar de la experiencia al máximo y descansar en las mejores condiciones, sin duda alguna esta es vuestra página web.
Tirad de contactos para encontrar alojamiento
Es una práctica muy extendida entre los Erasmus. Seguro que el mismo año en el que emprendéis esta aventura, muchos de vuestros compañeros/as de universidad la emprenderán también. Aprovechad esta situación para viajar a los destinos en los que se encuentren vuestros compañeros y prometed a cambio que vuestra casa estará disponible para ellos en caso de visitar la ciudad en la que realicéis el intercambio.
Los Erasmus son como una familia, este tipo de prácticas son de lo más normal. Que no os de vergüenza ninguna hacerlo.
El Erasmus en una experiencia única e irrepetible que debe hacerse bajo algunas condiciones. Uno de los requisitos fundamentales y obligatorios para embarcarte en esta aventura, es la obtención de la Tarjeta Sanitaria Europea (TSE). ¿Sabes qué cubre y qué no? ¿quieres saber cómo obtenerla?, en el siguiente post te contamos todo lo que necesitas saber sobre ella.
Recomendada por el Ministerio de Asuntos Exteriores
Su obtención forma parte de las recomendaciones que el Ministerio de Asuntos Exteriores da a los estudiantes Erasmus:
- Obtén la Tarjeta Sanitaria Europea, a través de ella se permite el acceso del beneficiario a los sistemas de salud en el Espacio Económico Europeo y en suiza.
- Otra de las grandes recomendaciones es que contrates un seguro de viaje. A lo largo de la estancia Erasmus pueden darse numerosos imprevistos. Estos imprevistos pueden hacer que necesites algunas coberturas que no están incluidas en la TSE.
Esta situación la afrontarás mejor con un buen seguro de viaje con asistencia médica y sanitaria. Ten en cuenta que las Embajadas y Consulados no pagan gastos médicos, ni de viaje, repatriación o alojamiento.
Coberturas de la TSE para aquellas personas que optan a irse de Erasmus
La definición actual que nos proporciona la seguridad social de la Tarjeta Sanitaria Europea es la siguiente:
“La Tarjeta Sanitaria Europea (TSE) es el documento personal e intransferible que acredita el derecho a recibir las prestaciones sanitarias que resulten necesarias, desde un punto de vista médico, durante una estancia temporal en el territorio del Espacio Económico Europeo o Suiza. Teniendo en cuenta la naturaleza de las prestaciones y la duración de la estancia, independientemente de que el objeto de la estancia sea el turismo, una actividad profesional o los estudios.”
Lo anterior no quiere decir que la sanidad sea gratuita, ya que eso dependerá de las condiciones de cada país. Es posible que a pesar de tener la tarjeta haya que pagar gastos médicos. Por lo tanto, además de la obtención de la tarjeta , es bastante recomendable la contratación de un seguro médico privado.
Qué no cubre la TSE
Por otra parte, dentro de las coberturas de la Tarjeta Sanitaria Europea quedan excluidas:
1.La Asistencia sanitaria privada.
2. La sanidad cuando se trata de un viaje realizado con la finalidad de recibir tratamiento médico.
3. La gratuidad de los servicios médicos. En algunos países de la unión europea la sanidad no es gratis y sus ciudadanos tienen que pagar determinados costes. La tarjeta lo que hace es otorgar al beneficiario los mismos derechos que a los ciudadanos del país.
4. La repatriación (traslado al país de origen).
Por ello, queremos dejar claro que la TSE no es la alternativa a un seguro de viaje. Te recomendamos consultar nuestro seguro de asistencia en viaje enfocado a intercambios Erasmus haciendo click aquí.
Quiénes la pueden solicitar y durante cuánto tiempo
Las personas que pueden optar a la tarjeta sanitaria europea son aquellos titulares del derecho y beneficiarios a su cargo que cumplan los requisitos exigidos por la legislación española y por los Reglamentos Comunitarios de Seguridad Social.
La tarjeta como tal es válida durante dos años, indicándose la fecha de caducidad en la mismas. La utilización en este periodo de dos años se encuentra condicionada a que el beneficiario siga cumpliendo los requisitos que se le exigieron al otorgarle la misma.
Países en los que es válida la Tarjeta Sanitaria Europea
Como su propio nombre indica, está diseñada para que funcione en el espacio económico europeo y en Suiza. Tendrá validez en los siguientes estados:
Alemania, Austria, Bélgica, Bulgaria, Chipre, Croacia, Dinamarca, Eslovaquia, Eslovenia Estonia, Finlandia, Francia, Grecia, Hungría, Irlanda, Islandia, Italia, Letonia, Liechtenstein, Lituania, Luxemburgo, Malta, Noruega, Países bajos, Polonia, Portugal, Reino Unido, República checa, Rumanía, Suecia y Suiza.
¿Cómo solicitar la Tarjeta Sanitaria Europea?
La tarjeta sanitaria europea se puede solicitar de tres formas; Internet, teléfono y en las oficinas Provinciales o Locales del ISM (Instituto Social de la Marina).
Cualquiera que sea la forma para solicitarla, esta se enviará al domicilio del beneficiario en un plazo no superior a 10 días. No entregándose en mano en ningún caso.
Aquí os dejamos un enlace para la solicitud/ renovación de la tarjeta sanitaria europea.
El Certificado Provisional Sustituitorio
Este es un certificado para cuando no es posible emitir ni recibir la tarjeta, como por ejemplo, cuando no da tiempo a recibir la tarjeta antes de irte de Erasmus. En este caso se podrá solicitar un certificado provisional de la misma que tiene el mismo vigor y capacidad que la tarjeta en sí pero que cuenta con un periodo de validez muchísimo menor ; unos 90 días.
