La vuelta a casa por navidad cuando vives fuera siempre es una fecha marcada en la que se mezcla la ilusión con los nervios y con unas ganas tremendas de ver y abrazar a los tuyos (ya sean amigos o familiares) pero, si hay algo especial que recordarás durante toda tu vida, es la vuelta por navidad de un Erasmus.
Cuando estás de Erasmus, y tenemos que reconocerlo todos aquellos que hemos estado, nos acabamos olvidando en cierto modo un poco de nuestros familiares, amigos y lugar en el que vivimos. Es inevitable, tantos sucesos diario hacen que se te olvide tu vida pasada y te dediques solo a disfrutar de todo lo bueno que te ofrece una experiencia de este tipo.
En este nuevo artículo de nuestro blog queremos que veas lo especial que es volver a casa por navidad de un Erasmus.
El reencuentro con tu familia.
Ay, los nervios en el aeropuerto y en el avión deseando aterrizar… que momento tan especial estás apunto de vivir cuando al bajar del avión estén tus familiares o tus seres más queridos recibiéndote con los brazos abiertos y una sonrisa de oreja a oreja. Unos lloran, a otros les da por reír pero, de lo que no cabe duda, es que es uno de los momentos más especiales de la vuelta a casa por navidad de un Erasmus.
Hay quienes dicen que la Navidad de un Erasmus es algo extraña por el cúmulo de sentimientos que conlleva esta visita y ser el centro de atención durante unos días pero, por regla general, esta mezcla de emociones suele ser bastante positiva.
Las cenas de navidad y año nuevo
¿Qué se contara tu primo, al que hace 6 meses que no ves? Aunque esto puede pasar sin haberte ido del Erasmus, cuando vuelves de un país en el que has sido un extranjero, todos los ojos se centran en ti, en tus vivencias, en tus ganas de contar cosas nuevas con las que dejarás a tu familia sin habla y en contar en cuántos países nuevos has estado este año.
Las cenas de navidad son un momento de unión, de felicidad de ilusión y, no nos olvidemos, de mucha comida buena y variada, aunque eso lo tratamos en el siguiente punto, las comidas de navidad siempre son un goce para tu paladar y más aún sabiendo que cada uno lleva a la cena lo que mejor sabe hacer.
El reencuentro con la gastronomía al volver por navidad de un Erasmus.
Seamos sinceros, la gastronomía española es inigualable. Seguramente, puede que hayas echado más de menos a la comida de tus padres que a tus propios padres (no estamos de coña, eh) y que estés deseando comerte un plato de cuchara cuando antes solo pensabas en hamburguesas y en comida basura.
Pero, tenemos una buena noticia, todo el mundo te esperará con sus mejores platos para cuidar a ese estudiante Erasmus que se fue y que, pobrecito, solo come comida mala y poco nutritiva (aunque no sea del todo cierto, coger este papel de víctima te ayudará a tomar unos kilos durante tu estancia en Navidad)
La cuestión es que, durante esta dos semanas que dure tu estancia Erasmus, podrás ponerte las botas y acordarte bastante bien de cómo es la gastronomía de nuestro país.
Tu pueblo, tu ciudad, tus tradiciones.
Normalmente cuando una persona hace un Erasmus, lo hace pensando también en cambiar de aires, en cambiar de rutinas e irse lejos para “volver a empezar”. Pero, haznos caso en esto, cuando vuelvas lo verás todo con otros ojos, con otra ilusión y descubrirás sensaciones y vivencias que antes no tenías en cuenta de tu ciudad de origen.
Esa calle que antes te parecía triste y aburrida, ahora tendrás otro color para ti, otra energía, otro aroma.
Irte de Erasmus también te hace valorar lo que dejaste atrás y darte cuenta de que, en realidad, es un lugar super especial porque es donde has crecido y pasado la mayor parte de tu vida.
Tus amigos, siguen ahí.
Sentir la calidez de tu grupo de amigos, sentir que todo sigue donde lo dejaste y que tus relaciones sociales son una de las mejores experiencias de tu vida, es algo que valorarás cuando vuelvas por navidad de un Erasmus, y es una sensación única.
Eso sí, no te pongas intensito contando tus experiencia en otro país, está bien hablar un poco, pero no todo el rato ya que te puedes convertir en un auténtico pesado. No quieras ser ese tipo de Erasmus, ni intentes dar envidia.
Sabemos que para cada Erasmus es distinto volver a casa por navidad, por eso te animamos a que nos cuentes tus experiencias a través de las redes sociales y que nos mantengas informados de todo lo que se te ocurra. ¡Nos vemos en el próximo artículo!
